La alergia primaveral resulta muy frecuente en pacientes de todas las edades, aunque pueden agravarse en pacientes asmáticos o con dificultades respiratorias. Por ello, en el post de hoy explicaremos cuáles son los síntomas más comunes en esta época del año y cómo debemos actuar para minimizar sus efectos.

Comienza la primavera y con ella la temporada de alergias y reacciones cutáneas. Por lo general, se trata de síntomas superficiales que se palian mediante determinados medicamentos o productos farmacéuticos recomendados por un profesional.

Causas y síntomas:

Durante la primavera, los pacientes alérgicos suelen sufrir reacción a diferentes especies, como por ejemplo:

  • Gramíneas
  • Olivo
  • Platanero
  • Ciprés
  • Artemisa

En cuanto a los síntomas, estos dependen del grado de alergia que desarrolle cada paciente, aunque existen algunos signos comunes que son:

  • Conjuntivitis
  • Congestión nasal y mucosa
  • Picor en garganta y nariz
  • Estornudos repetitivos
  • Tos y pitidos
  • Dificultad para respirar

Tratamiento y prevención:

El tratamiento habitual para casos de alergia diagnosticada, es la aplicación de antihistamínicos. Este tipo de medicamentos deben estar recetados por un especialista y resulta fundamental seguir las indicaciones del prospecto para la eficacia de los mismos. Además, existen algunos hábitos diarios que pueden minimizar los efectos de la alergia, como por ejemplo:

  • Mantener las ventanas cerradas para evitar que entren restos de polen en el interior de casa
  • Evitar permanecer muchas horas al aire libre en franja de cinco a diez de la mañana y de siete de la tarde a diez de la noche, ya que son las horas de mayor polinización
  • No secar la ropa en exteriores para impedir que esta se impregne
  • Utilizar gafas de sol y mascarilla

Si padeces varios de los síntomas anteriores, recuerda que puedes pedir cita con nuestros especialistas para una evaluación en consulta.